Queramos o no, esa sentencia se cumple inexorable. Lo que asusta un poco es que desde el primer azote, al nacer, ya todo es consecuencia. Un saludo y gracias por ayudar a la reflexión.
Todo llega a su punto final. Y... este "llegando" de una bola, magistralmente captado por tu cámara, crea la incognita de... tocará o no tocará, llegará o no llegará a su destino. Felicitaciones, y un abrazo.
8 comentarios:
para bien y para mal
y aquí estamos :)
Así es Nuke, y tú tienes siempre la mirada a punto para captarlo...
Un abrazo
Marian
Queramos o no, esa sentencia se cumple inexorable. Lo que asusta un poco es que desde el primer azote, al nacer, ya todo es consecuencia.
Un saludo y gracias por ayudar a la reflexión.
Todo llega a su punto final. Y... este "llegando" de una bola, magistralmente captado por tu cámara, crea la incognita de...
tocará o no tocará, llegará o no llegará a su destino.
Felicitaciones, y un abrazo.
La verdad es que en la vida todo sucede así, la mayor parte de las veces sin saberlo, la bola llega a su destino y todo cambia.
Una foto espléndida y perfecta para el título de este post.
Un abrazo.
A suggestion incredible, thanks!
He disfrutado viendo tus fotos y escuchando a la "Voz".
Un abrazo.
Me recuerda tu frase a la de Action, Réaction, que decían en la película Los Chicos del Coro... Abrazo azul
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